Cuando uno piensa en la trufa le viene a la cabeza un producto al alcance de muy pocos, una exquisitez a degustar solo en los lugares más selectos. Citas como trufa-te vienen a desmentir la fama de este hongo que es mucho más que eso. Considerada desde tiempos inmemoriales como un placer para los sentidos, la vida de la trufa es mucha y muy variada, y puede llegar a ser el complemento ideal para muchos de nuestros platos. En esta edición, trufa-te invita a conocer la trufa de la mano de algunos de los fogones con más solera de Monzón y Cinca Medio.

En Monzón se ha organizado toda una jornada festiva y cultural para acompañar a la trufa. Desde por la mañana habrá visitas guiadas a los lugares más emblemáticoscomo son el Castillo y a la Catedral de Monzón, uno de los principales centros de población de la provincia. Antes de comenzar a probar las trufas, aquellos que lo deseen podrán conocer un poco mejor este producto con un taller de identificación en el que el investigador Pedro Marco dará las claves para diferenciar tipos de trufa.

Vanguardistas y tradicionales, frías y calientes, tanto para abrir boca con entrantes, como para degustar segundos platos y postres. Este año, de las cocinas de Trufa-te saldrá un menú con nueve pequeñas creaciones gastronómicas cuyo denominador común es ese toque de trufa negra que aromatiza cada bocado y que en encuentra el mejor maridaje con los productos agroalimentarios del entorno.

Los nueve establecimientos que ofrecerán elaboraciones con la trufa como protagonista son el Restaurante el Cacao, Restaurante Las Ripas, Bar Restaurante Acapulco, 4 Esquinas, Hostal El Portal, Hotel MasMonzón, Casa Santos, Restaurante Piscis y el Restaurante-Pastelería Canela. Estos lograrán satisfacer el paladar de los más exigentes.

Las tapas que podrán degustarse son:

Crema de queso con trufa negra, avellanas caramelizadas y compota de tomates asados Arancini trufado de arroz brazal y longaniza de Alcolea.

Trufa de la Ribagorza en brandada de bacalao sobre crema de calabaza con puerros y sus crujientes.
Sobre crujiente trufado de puré de patata con yema de huevo y langostino.

La merendola que mola.

Bacalao en tempura de azafrán, chilindrón de morros de vacuno, merengue trufado, granny smith y bastones de trufa.

Crepineta de jarrete de ternera y mozzarella trufada con crujiente de queso y puré de monalisa y arbequina de Albalate.

Crème brûlée -espuma de choco blanco-, yogur de fonz y tuber melanosporum.

Trufa de chocolate con trufa negra de la Ribagorza.